En el sitio equivocado en el momento equivocado
- Pablo Martínez Belmonte
- 9 jul 2020
- 3 Min. de lectura
Ya queda menos, solo 4 jornadas para acabar una temporada que puede significar el antes y el después en cuanto a la trayectoria del equipo. El primer año desde la vuelta del equipo a la Primera División en que no nos toca rezar para que los equipos de abajo acaben sacando los menos puntos posibles. En tierra de nadie pero... ¡Bendita tierra de nadie! Al Levante le tocará jugar una papeleta desconocida en sus más de 110 años de historia, juez y posible verdugo de su guerra, hoy cogerá el ferri con destino a la España más guiri para enfrentarse al Real Mallorca CF, más fuera que dentro de la Primera División buscarán su última oportunidad de pelear por los escasos botes salvavidas que van dejando el resto de los equipos.
No será turismo pero tampoco descartemos que algún jugador pase la noche en las extravagantes aguas y avivados bares de Magaluf, pues ya de por si el partido es una montaña rusa para los granotas ya que no se respetarán las 72 horas pactadas con La Liga como descanso entre jornadas. En cambio el Mallorca lleva doble carga respecto al Levante, los de las Baleares llevan casi 6 días de descanso, todo un mundo comparado con los algo más de 2 que lleva el Levante. Además cuentan con el factor adrenalina, inevitable cuando uno se juega tanto como esta noche lo hará el Mallorca, con todos sus activos disponibles para su particular guerra en que el Levante solo es el equipo equivocada en el momento menos indicado.
Es momento de analizar a los diablillos ¿Tienen lo que hay que tener para seguir soñando? Lo desconozco, aunque tiempo de sobra para motivarse y analizar al Levante han tenido de sobra. Su último partido fue en el Wanda encajando un contundente 3-0, cuando el Atlético marca tantos goles sabes que en esa defensa pasa algo, y es que el Mallorca es el equipo más goleado con 59 goles en contra. A pesar de todo, 39 de esos goles han sido fuera de casa pues en Son Moix no les ha ido tan mal, incluso llevan balance positivo de goles, gracias en cierto modo por el 5-1 endosado al Celta, e incluso han sido capaces de ganar al líder y endosarle otros 4 al Valencia. Si tienen el día ya puede venir la España de Luis Aragonés que no ceden.
La principal ventaja del Mallorca está en el tiempo de descanso, lo necesario como para plantear un partido en condiciones normales, aunque sus jugadores titulares lo fueran también ante el Atlético no les traerá problemas de gasolina. Tampoco cuentan con bajas sensibles al igual que el Levante con la vuelta de Bardhi, solo espero el mejor XI posible de los vermellones.
Por parte del Levante serán todo rotaciones obligas, la vuelta de la pareja de laterales de moda del fútbol español, o al menos la que más alegría produce en los rivales, Melero apunta a titular al igual que Bardhi, Sergio León, Roger, quien sabe si incluso Rober Pier hará acto de presencia como titular o si con Europa ya en la Antártida, Paco se aventura a sacar a Koke Vegas, Duarte o darle la última oportunidad a Hernani como titular. La única cosa que está clara son las excesivas rotaciones que necesitará el equipo para no descomponerse a trozos físicamente.
El Levante es solo una cabeza de turco, un trozo de carne echado a los leones, un gladiador ante una tribu que con lo poco que tiene lucha por aferrarse al sueño de la Primera División. Lo mínimo que se le puede pedir hoy al Levante es empatar en intensidad, lo máximo razonables es por lo menos pelear hasta el final, pero las piernas no las recargan la fé y los horarios los ponen tres trogloditas así que a pesar de la evidente diferencia entre los equipo, lo normal sería una victoria del Mallorca por su excesiva motivación por salvar la categoría y por la evidente mejor condición física a la que seguramente llegan al choque. Con todo esto, quiero rescatar el titular de el periódico El Desmarque "¡Que bien se ven los toros desde la barrera!", así es, nosotros este año no nos quedamos sin San Fermín, este año nos toca recuperar salud... Aunque quizás tampoco sea el año para decir eso.
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