Continuando con el capítulo de salidas, Radoja terminó una trayectoria de 3 años en el club valenciano el pasado último día de junio, en que ni jugador ni entidad hicieron un amague para expandir sus vínculos.
El serbio llegó el 21 de agosto de 2019. Se trató de una contratación muy arriesgada de Manolo Salvador ante la incertidumbre física del jugador. El jugador no pudo disputar ningún minuto en la temporada 18/19 con el Celta. De ahí pasó a titular indiscutible en su primer y mejor año con el Levante.
El club granota adquirió sin costes los derechos de Nemanja tras rescindir contrato con el Celta de Vigo, en donde fue importante cuando las lesiones respetaron su rendimiento. Un fichaje fomentado por las dudas sobre el rendimiento de Vukcevik.
Irrupción física (19/20)
Debutó el 21 de septiembre de 2019, lo que precedió una racha de 15 partidos consecutivos de titular, despejando dudas sobre su aspecto físico. Tardó 8 partidos en marcar su primer gol, igualando los registros goleadores de toda su etapa en Vigo. No obtuvo ninguna portería imbatida en su primer año.
Hasta que duró la gasolina (20/21)
Radoja hubo de hacer frente a su historial de lesiones que tanto emborraban sus expectativas. Los problemas físicos lastraron sus minutos que pasaron de 1.900 a 1.181 en competición liguera.
La buena inercia del Levante en Copa del Rey propició un calendario de 14 partidos durante el mes de enero y mitad de febrero. El serbio completo íntegramente 12 de ellos. En los 2 restantes, en uno fue sustituido y en otro entró de suplente.
Finalmente sucedió lo que muchos advertían y el exceso de carga física rompió a Radoja, que de la jornada 24 hasta la última solo pudo participar en 2 partidos debido a las lesiones.
De pivote a creador (21/22)
En su último año de contrato el rendimiento fue muy acorde a los resultados del equipo. La participación fue dictada por el invento de Alessio, que cambió la función de pivote defensivo de Radoja a un verdadero 8 creador, causado y obligado por la poca disponibilidad de Campaña y los niveles pocos sugerentes de Bardhi y Melero.
Mantuvo sus 1.148 minutos, lo que indica nuevamente una participación intermitente. Hasta la jornada 33 no completó 4 partidos consecutivos. Al igual que el equipo, no fue suficiente para remontar el inicio desastroso del equipo.
A diferencia que otros compañeros, Radoja mantuvo su profesionalidad durante el recorrido sin contemplar los resultados. Dejó muy impresionado que aguantara aquel tramo de inicios de años de la temporada 20/21. Al final su rendimiento fue intermitente. Una época de esplendor daba paso a un parón de meses.
A día de hoy su futuro señala Pucela en la nueva etapa del recién ascendido Real Valladolid.
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