El Levante cumplió con el tramite, enseguida cerró cualquier duda contra un Racing que ya había jugado su papel en las redes sociales. No hubo misterio, ganar sin bajar del autobús con un XI que perfectamente podría ser alguna vez el titular. Pronto se adelantó el Levante, más allá de un palo en una jugada en fuera de juego, el único susto fue ver a Vukcevik de titular.
El XI estaba plagado de los actuales suplentes, aquellos con menos minutos este año. La mirada puesta en Sergio León, que con su hat-trik rompe la sequía de 11 meses sin ver puerta en partido oficial. La última vez fue el 0-1en el empate ante el Jaén, partido para olvidar. Mucha generosidad de Morales con el pase de la muerte, y de Coke que no se enfadó cuando el cordobés le robó el gol. El corazón levantinista desea que sea un gran golpe de ánimo.
Varios pasaron el tramite. Morales jugó un gran partido, Melero una gran segunda mitad, Son puede ser el hombre del partido, Giorgi estrena su casillero goleador... Mucho ojo al ratillo de Seviyank. De milagro no marcó un par.
Otros muchos no lo hicieron. Otro paso atrás de Toño ("Coño" para el comentarista), partido malo sin acierto en los pases y la barriga por delante en los minutos finales. El Levante está perdiendo un gran activo en su momento. Rober Pier sin más, a Duarte se le fue la pierna a los tobillos de los jugadores murcianos más de una vez. Dani Gómez falló 2 goles clarísimos. Aunque estos partidos son solo anecdóticos.
El partido fue tan plácido que hasta los árbitros tuvieron tiempo de anular 2 goles legales, uno a Melero y otro de córner por falta, dar otro ilegal tras fuera de juego de Melero en el pase a Giorgi, y comerse un penalti a Morales. Insisto que del Racing Murcia más aplausos en la sustitución de Sergio León por parte de su afición que ocasiones creadas.
En definitiva, el Levante estará en el bombo para la siguiente ronda de la Copa donde lo más probable será un emparejamiento ante otro club de los modestos, en una competición con pocas sorpresas este año. Solo han caído Ponferradina y el Mirandés de Pablo Martínez, jugador cedido por el Levante. El Racing podrá volver a decir ¡Que ruina! aunque esta vez sin ayuda mediática.
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